La historia de Oberheim Electronics: un gigante americano
Tom Oberheim pasó de diseñar sencillos pedales de guitarra a crear algunos de los sintetizadores más emblemáticos jamás fabricados. Esta es la historia de Oberheim.
La historia de Oberheim
Los Estados Unidos nos han dado varias empresas de sintetizadores realmente fantásticas: Moog, ARP o Sequential solo por nombrar algunas. Sin embargo, ninguna personifica el sonido estadounidense tan bien como Oberheim. Los sintetizadores Oberheim son salvajes, intensos y suenan increíblemente «gordos». Para muchos sintetistas, son sencillamente el alfa y el omega de los sintetizadores polifónicos analógicos.
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La historia de Oberheim: con un poco de ayuda de los amigos
La creación de un sintetizador suele ser un esfuerzo grupal. Incluso cuando la compañía lleva el nombre de una sola persona, como Moog, Buchla o ARP, se necesita a más gente para diseñar un buen sintetizador. Y esto es especialmente cierto cuando se habla de Tom Oberheim. A lo largo de su larga historia de diseño de instrumentos musicales y efectos, ha tenido su buena dosis de ayuda por parte de algunos nombres notables de la industria de los sintetizadores.
Tom inició su carrera profesional en Los Ángeles, después de haberse mudado desde Kansas debido a su amor por la música. Trabajaba en empresas de informática durante el día, y diseñaba unidades de modulación de anillo por las noches.
Fabricaba esas unidades para algunos de sus amigos, como el trompetista de jazz Don Ellis, la banda de pop psicodélico The United States of America, y el compositor Leonard Rosenman, quien le encargó uno para la banda sonora de The Planet of the Apes. Esto lo llevó a trabajar directamente para la empresa Maestro, con su procesador de modulación en anillo convirtiéndose en el RM-1A. Justo ahí nació Oberheim Electronics.
El cada vez más creciente interés en los sintetizadores hizo que poco después se convirtiera en el distribuidor para la costa oeste de ARP. Donde tenía acceso a los esquemas del 2600, y con los que creó una modificación que permitía a los usuarios reproducirlo en modo duofónico.
La historia de Oberheim: entonces llegó el SEM
El primer producto lanzado bajo el nombre de Oberheim, sin duda un momento trascendental en la historia de Oberheim, fue el DS-2. Un secuenciador digital que permitía controlar un sintetizador Moog o ARP de forma remota. Tener un secuenciador tan a mano, inspiró a Tom a crear un sintetizador sin teclado, uno diseñado para ampliar las capacidades de un Minimoog o un ARP Odyssey. El resultado fue el SEM de 1974, o «Synthesizer Expander Module«, que cambiaría la vida de Tom para siempre.
El SEM era un sintetizador relativamente simple en diseño, con dos osciladores (con formas de onda de diente de sierra y pulso variable), dos envolventes ADS y un LFO con una única forma de onda triangular. Sonaba increíble, y también contaba con un filtro maravilloso, uno que desde entonces se ha hecho famoso y sin duda es una de las señas de identidad del sonido Oberheim. Ahora lo conocemos como el filtro SEM, y es un filtro de 2 polos.
Esto generaba un potente contraste con el filtro Moog Ladder de 4 polos, que era el estándar de la época. También era multimodo, con una perilla para cambiar de paso-banda a paso-bajo, y luego de forma continua también ofrecía un recorrido con modos notch y paso-alto. Suave, cálido y aireado, sigue siendo uno de los mejores filtros que se han diseñado nunca.
Tom diseñó el SEM con la ayuda de Dave Rossum de E-mu Systems. Y después se lanzó, con la ayuda de otro compañero de E-mu, Scott Wedge, para las versiones con teclado de 2 voces, 4 voces y 8 voces. Fueron algunos de los primeros sintetizadores analógicos polifónicos disponibles en el mercado, aunque lo cierto es que combinaban múltiples unidades SEM con una sección de programación adicional y un teclado.
La historia de Oberheim: un referente de los polifónicos
Tan icónico como lo fueron las series SEM y Voice, lo fue también el triumvirato de los grandes polifónicos de Oberheim, que comenzaron con el OB-X y siguieron con el OB-Xa y el OB-8. Estos tres instrumentos, lo que realmente definieron en gran medida el sonido de los grandes sintetizadores de la década de 1980.
Rush. Prince. Queen. ¿Qué tenían en común estos grupos y artistas? Todos hicieron sonar un OB-X en sus discos. Lanzado en 1979, el OB-X de Oberheim abrió un nuevo capítulo en la carrera de Oberheim. Simple en tecnología de síntesis, pero masivo en sonido, ofrecía dos VCOs extremadamente gruesos, un filtro de paso-bajo de 12dB/octava basado en tecnología SEM, dos envolventes ADSR y memorias gracias al chip Z80 integrado. Estaba disponible en tres configuraciones diferentes: cuatro, seis u ocho voces.
Oberheim no tardó entonces en lanzar el OB-Xa al año siguiente. Disponible en las mismas configuraciones de voz, el OB-Xa tenía una arquitectura de síntesis similar, pero hacía montaba un filtro de 2 y 4 polos conmutable. También era bi-tímbrico, con la posibilidad de dividir el teclado (split) y hacer sonar ambas partes al unísono.
A diferencia del OB-X, que utilizaba circuitos discretos, Oberheim optó en esa ocasión por chips Curtis CEM, circuitos integrados optimizados por Doug Curtis para su uso en sintetizadores. Aunque el sonido era un poco diferente al del OB-X, no era en absoluto menos popular, y probablemente sea más conocido por ser el sintetizador que Eddie Van Halen toca en «Jump«. Oberheim completó su trilogía OB en 1983 con el OB-8.
La historia de Oberheim: el tour mágico del Matrix
Los teclistas y sintetistas conocían los sintetizadores Oberheim por tener un sonido excelente, pero al mismo tiempo una arquitectura de síntesis relativamente simple. Todo eso cambió con la línea de sintetizadores Matrix, que debutó en 1984 con el Xpander, un sintetizador analógico de seis voces.
Ofrecía dos VCOs basados en CEM3374 por voz, 15 variaciones de filtro CEM3372 y cinco LFOs, además de una innovadora matriz de modulación para unirlo todo. Un año despuése, Oberheim lanzó el Matrix-12, que era esencialmente un teclado que reunía dos Xpanders. Para mucha gente, el Matrix 12 la expresión misma de la síntesis analógica de la década de 1980.
Aunque potentes, el Xpander y el Matrix-12 también eran extremadamente caros. Y pensando en menos pudientes, Oberheim lanzó en 1985 el Matrix-6, un instrumento de seis voces que recortaba considerablemente su precio. Otros lanzamientos importantes de esta gama fueron el Matrix-6R (1986) y el Matrix-1000 (1988), aunque este último solo ofrecía un rack con presets.
La historia de Oberheim: malos tiempos para los sintetizadores analógicos
Aunque fueron bien recibidos, los sintes de la familia Matrix no fueron lo suficientemente populares en lo comercial como para mantener Oberheim a flote, y la compañía sufrió el mismo destino que muchos otros fabricantes de la época. En 1985, Oberheim se declaró en quiebra y la marca fue vendida. Tom se quedó a bordo durante algunos años, pero ala final se fue para fundar una nueva compañía: Marion Systems, y más tarde SeaSound, una compañía que fabricaba interfaces de audio.
Más tarde, en 1988, Gibson compró Oberheim (sin Tom), y en 1994 lanzó el OB-Mx, un sintetizador analógico de dos voces que se podía expandir hasta las 12 voces. Curiosamente, tenía dos filtros, un SEM de 2 polos y un filtro ladder estilo Moog de 4 polos. Y aún más interesante, su desarrollo contó con la colaboración de Don Buchla y el ingeniero asociado de Buchla D.N. «Lynx» Crowe.
La historia de Oberheim: y más de ayuda de los amigos
En 2009, Tom Oberheim regresó al mundo de los sintetizadores con una versión actualizada del SEM bajo la marca Tom Oberheim. Después llegaron el Son Of Four Voice en 2010 y el Two-Voice Pro en 2015.
En 2016, Dave Smith se unió a Dave Rossum, Alan R. Pearlman y Don Ellis para ayudar a Tom y lanzar el OB-6, un instrumento híbrido Oberheim/Smith, bajo la marca Sequential.
Y cuando Gibson le devolvió el nombre de Oberheim a Tom como un gesto de buena voluntad en 2019, el escenario estaba listo para una nueva era de sintetizadores Oberheim. La cosa se puso realmente seria con el OB-X8 de 2022, un monstruo polifónico que reúne lo mejor de la serie OB en un instrumento moderno. Y justo en este 2025 que llega a su fin, Oberheim puso la guinda con el TEO-5.
Legado estadounidense
Había más cosas que me hubiese gustado haber contado en esta historia, claro. Las cajas de ritmo Oberheim, por ejemplo. El trabajo de Tom en la empresa Marion Systems. Su participación en la creación del protocolo MIDI. Sin embargo, como siempre sucede con estos artículos tan interesantes, estoy muy limitado por el espacio que tengo para escribir.
Lo que no puedo dejar de escribir es que Tom es un verdadero pionero de los sintetizadores que merece ser recordado en los mismos términos que Bob Moog, Dave Smith, Alan R. Pearlman y Don Buchla.
Más información
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