Gigantes británicos: la historia del Mellotron. ¿El primer sampler del mundo?
Todos, desde los Beatles hasta Oasis, han usado el Mellotron. Algo que hace que este teclado electromecánico basado en cinta sea apto para todas las edades. Aunque es una historia muy británica, la del Mellotron en realidad comenzó en Estados Unidos. ¿Conoces toda la historia? Sigue leyendo para saber más…
La historia del Mellotron
Un sampler analógico. El primer ROMpler del mundo. El teclado de arreglista de los ricos. La potencia del rock progresivo. El Mellotron era todas estas cosas y mucho más. Su influencia es masiva y de gran alcance, tanto es así que, a pesar de que no es un sintetizador, tuvimos que incluirlo en esta serie sobre la historia del sintetizador.
Un Mellotron M400 abierto
En caso de que de no lo sepas, el Mellotron fue una gama de instrumentos que apareció por primera vez en Inglaterra a mediados de la década de 1960. Eran capaces de replicar sonidos acústicos con un realismo increíble. Esto se debía a que, en lugar de osciladores y transistores, utilizaban carretes de cinta magnética que contenían los sonidos de instrumentos reales grabados. Cada tecla tenía su propia longitud de cinta, que se presionaba sobre un cabezal de reproducción cuando se pulsaba la tecla. Violines, flautas, arreglos completos, tambores: ahí había de todo, y todo sonaba a gloria.
La influencia del Mellotron en la música pop moderna es difícil de pasar por alto. ¿Las flautas de «Strawberry Fields Forever» de The Beatles? Mellotron. Las cuerdas de «The Rain Song» y las flautas en «Stairway to Heaven» de Led Zeppelin. También Mellotron. Las canciones de Radiohead, Yes, Hawkwind, Oasis, OMD, incluso de Marilyn Manson contienen el sonido del Mellotron.
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Esta es la historia de un instrumento británico por excelencia. La historia que te contamos aquí, sin embargo, no comienza en Inglaterra, sino en Estados Unidos.
La historia del Mellotron: el Chamberlin entra en escena
En la era de la posguerra, la cinta magnética estaba de moda. Y al estadounidense Harry Chamberlin se le ocurrió la idea de usarla para proporcionar sonido a un instrumento. Trabajando desde casa desde el año 1949 desarrolló el Chamberlin, un instrumento lleno de bucles grabados en cinta. Estos contenían instrumentos meticulosamente registrados (interpretados por miembros de la Orquesta Lawrence Welk nada menos) y permitían a los músicos e incluso a los laicos sonar como una banda completa.
Chamberlin
Con Bill Franson, su antiguo limpiador de ventanas, como vendedor, Chamberlin expandió lentamente su negocio, e incluso le vendió su producto a gente como Bobby Darin y Elvis Presley. Un día, en 1962, Harry se dio cuenta de que Bill había desaparecido, porque resulta que se había ido a Inglaterra, llevándose consigo dos Chamberlin Model 600. Allí puso un anuncio buscando una empresa que pudiera suministrarle cabezales de reproducción de cinta, y encontró una empresa de ingeniería con sede en Birmingham llamada Bradmatic Ltd.
La historia del Mellotron: Birmingham Bound
Con la intención de mejorar el Chamberlin y el estudio reservado para grabar nuevas cintas, los chicos de Bradmatic formaron una nueva compañía: Mellotronics. El primer instrumento que construyeron, el Mellotron Mk 1 de 1963, presentaba dos teclados dispuestos uno al lado del otro, cada uno con 35 teclas y sonidos. El lado derecho contenía los instrumentos principales, mientras que el izquierdo tenía ritmos y arreglos, la idea era que se pudieran tocar canciones enteras usando solo unos pocos dedos. El Mk II, que salió al año siguiente, contaba con un complemento completo de arreglos, múltiples secciones rítmicas e instrumentos principales dispuestos en cintas multipista. Diseñados para uso en el hogar y en el club, famosos de la época como Peter Sellers y la princesa Margarita los compraron, al igual que la BBC, que recargó los suyos con efectos de sonido personalizados para su uso en el Taller Radiofónico.
Mellotron Mk1
La historia del Mellotron: los últimos modelos
A mediados de la década de 1960, Harry Chamberlin se había dado cuenta de lo que estaba pasando, y no debía estar demasiado contento con su limpiador de ventanas. Sin embargo, llegó a un acuerdo con Mellotronics. Ellos podrían seguir vendiendo el Mellotron en el Reino Unido, mientras que Chamberlin tendría derechos exclusivos en los Estados Unidos. Mellotronics se rebautizaría como Streetly Electronics en 1970.
Mellotron M300
El primer instrumento lanzado después del acuerdo con Chamberlin fue el M300 en 1968. Este modelo combinaba las partes solistas y las de ritmo en un solo teclado de 52 teclas, aunque pronto sería reemplazado por el M400,en 1970. En un guiño a cómo los músicos usaban de forma habitual el Mellotron, el M400 eliminó la parte de ritmos por completo, dejando solo los sonidos solistas. Streetly Electronics también redujo el tamaño, lo que lo hizo portátil (relativamente al menos) y, por lo tanto, más atractivo para los músicos que salían de gira.
La historia del Mellotron: un cuento sobre dos «Trons»
Las ventas continuaron a principios de la década de 1970, seguramente la edad de oro del Mellotron. Gracias sin duda a la popularidad del rock progresivo, además de a la falta de cualquier competencia real de teclados polifónico que no fuesen órganos, Streetly logró vender alrededor de 1800 unidades del M400. No está mal para un instrumento que se vendía por 625 libras, que ahora mismo equivaldrían a unas 12.000 libras o unos 14.000 euros.
Novatron M400
Sin embargo, debido a un desacuerdo de marca con el distribuidor estadounidense, Streetly perdió los derechos sobre el uso de la marca Mellotron. Sin inmutarse, continuaron con su actividad cambiando el nombre del producto a Novatron. Lanzaron entonces el Novatron Mark V en 1977 (basado en el efímero Streetly Mellotron Mark V de 1975) y el Novatron M400 en 1978, que era el clásico M400 pero con otra etiqueta. También estaba el Novatron T550, que ponía al M400 en un estuche de transporte con el que era más fácil viajar, incluso en avión. La tienda a pie de calle cerró en 1986 debido a la falta de interés de los músicos y a la pérdida de cuota de mercado de los samplers.
Mientras tanto, los usurpadores estadounidenses Sound Sales intentaron hacer su propio Mellotron de nueva factura. Un extremadamente raro 4 Track que salió en 1980, y que nunca llegó a despegar, fabricándose solo alrededor de cinco unidades.
La historia del Mellotron: de lo analógico a lo digital
Pero ese no es el final de nuestra historia. En 1997, Streetly se reestructuró, inicialmente para dar servicio a los Mellotron existentes, y luego, en 2007, para hacer nuevos modelos. Bautizado como el M4000, presentaba el diseño y el chasis de un M400, pero con un cerebro digital para complementar las cintas analógicas del interior.
Mellotron M4000
Mientras tanto, a finales de la década de 1980 en Estados Unidos, Sound Sales estaba sufriendo el mismo destino que Streetly Electronics. El estadounidense David Kean compró los derechos de Mellotron a una Sound Sales en apuros, así como lo poco que quedaba por comprar en el Reino Unido. Y junto al entusiasta sueco Markus Resch, diseñaron y construyeron los Mellotron Mark VI y Mark VII.
Como suele decirse: si no puedes vencerlos, únete a ellos. Y en 2010 Resch, que ahora trabaja por su cuenta desde Suecia, presentó el Mellotron M4000D, el primer Mellotron digital. A este primero le siguieron el M4000D Mini en 2012, el M4000D Rack en 2014 y Mellotron Micro en 2017.
El eterno Mellotron
Lo que comenzó como una especie de novedad muy cara, después de décadas de uso por parte de músicos inteligentes y con visión de futuro, se ha convertido en un instrumento estándar. Al igual que el Minimoog, el órgano Hammond o incluso la guitarra Stratocaster, el sonido del Mellotron ahora tiene su lugar en la música moderna. Es a la vez espeluznante e inquietante, pero también muy hermoso, y puede sonar retro o futurista, dependiendo de cómo lo uses.
Si bien las versiones digitales modernas son sin duda más fáciles de usar que las originales, o como mínimo requieren mucho menos mantenimiento, siguen siendo instrumentos premium con precios premium. Afortunadamente, muchas empresas de desarrollo de instrumentos virtuales han lanzado innumerables recreaciones en software del Mellotron, incluidas GForce Software y Arturia. Incluso puede que tengas unos cuantos sonidos de Mellotron en la biblioteca de instrumentos incluida en tu DAW.
El Mellotron es un instrumento increíble con una historia aún más increíble. Larga vida al Mellotron, sin importar quién los fabrique.
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