Reseña de la Harley Benton MR-Modern: Un diseño clásico con especificaciones modernas
¿Candy Apple Red de estilo vintage y tacto moderno?
4,0 / 5,0 | 
Harley Benton me ha enviado uno de sus nuevos modelos MR-Modern recientemente lanzado al mercado para que lo analice y haga una reseña. Como su nombre sugiere, esta guitarra de estilo vintage inspirada en las Mosrite tiene un montón de características modernas. En principio ofrece lo mejor de ambos mundos, para los guitarristas que buscan tanto estilo como rendimiento.
Reseña
Como parte de mi trabajo tengo la suerte de poder tocar y probar muchas guitarras de distintos precios y de diferentes compañías de todo el mundo. Cuando Harley Benton se ofreció a enviarme uno de estos nuevos modelos MR-Modern para que le hiciera una reseña, estaba realmente interesado en saber cómo se comportaría frente a la competencia.
Cualquiera que lea habitualmente Gearnews sabrá sin duda que formamos parte del grupo Thomann; Harley Benton es una marca propia de Thomann. No obstante, no voy a ser indulgente con esta reseña; Harley Benton sabe que siempre digo lo que pienso y me anima a ello. Como empresa, siempre buscan lanzar mejores instrumentos para los músicos, y en Gearnews siempre nos mantenemos imparciales. Una vez aclarado esto, pasemos a la reseña en sí…
La Harley Benton MR-Modern está claramente basada en el aspecto clásico de una Mosrite de los 60, pero con especificaciones y hardware modernos. Esta es una guitarra de aspecto muy atractivo, con muchas cualidades para los guitarristas modernos.
MR-Modern en CAR
Harley Benton MR-Modern
Cuando saqué la MR-Modern de la caja en que venía, me sorprendió gratamente que no fuera excesivamente pesada. Mi gusto personal por el peso de las guitarras es que no sean demasiado pesadas, aunque tampoco ridículamente ligeras, prefiero un instrumento sólido que aguante ser tocado en directo. Curiosamente, la guitarra estaba prácticamente afinada cuando la saqué; supongo que esto se debe a la combinación de afinadores con bloqueo y a la cejuela GraphTech TUSQ, todo ello trabajando en armonía con el vibrato Wilkinson VS-50 II Precision Tremolo. La guitarra se entrega encordada con cuerdas D’Addario de calibre 10, que parecen ser nuevas.
Afinadores estilo vintage con bloqueo
Ajuste y acabado
Pasé unos 20-30 minutos comprobando el acabado Candy Apple Red, buscando cualquier problema de pintura o marcas de herramientas. No había ninguna, y el acabado está realmente bien aplicado y pulido. El talón del mástil está súper firme y bien alineado, que es exactamente lo que uno espera de un diseño atornillado.
Candy Apple Red
Acero inoxidable
El ajuste de fábrica es bueno. La acción de las cuerdas era baja al sacarla de la caja, y no he tenido necesidad de cambiar nada del ajuste desde que la guitarra está en mi poder. El puente Wilkinson es suave y una vez que estiré las cuerdas nuevas, vi que la guitarra se mantenía bien afinada. La entonación también era perfecta, como era de esperar.
El mástil transmite una sensación bastante moderna al tacto. Tiene un acabado suave en la parte trasera. El diapasón de ébano de Macassar es oscuro, y los trastes de acero inoxidable son suaves y tienen un buen acabado. Tener puntos laterales que brillan en la oscuridad en el mástil es también una atractiva característica profesional que valoro. El acabado satinado tiene un gran tacto y ofrece poca resistencia, lo que hace que sea cómodo de tocar. El mástil da la sensación de ser bastante ancho, ya que la cejuela tiene 42 mm de ancho, y el diapasón es muy plano con un radio moderno de 12″.
Artec AHC-90 Soapbar y vibrato Wilkinson VS-50 II
Alnico-5
Estos modelos están equipados con un par de pastillas humbucking Artec AHC-90 Soapbar Alnico-5. Tienen un volumen maestro, un control de tono con push/pull para dividir bobinas, y un selector de pastillas de tres posiciones. Estuve más de una semana conectando la guitarra a varios amplificadores. También probé de todo, desde limpios estilo Fender, pasando por tonos crunch tipo Plexi, e incluso sonidos de alta ganancia estilo amplificador Mesa.
En general, diría que las pastillas son el eslabón más débil del diseño. Le falta mordiente a la pastilla del puente y la pastilla de mástil estaba bien. Sólo que poco inspiradora. Me encontré ajustando los controles de la guitarra y los del ampli con frecuencia para conseguir sonidos aceptables. El sonido single coil de la bobina dividida me pareció bastante inutilizable, ya que se notaba una importante caída de volumen cuando la activaba. Eso me molestaría en una situación de directo ya que se trata de una enorme bajada del nivel de salida.
Los controles de la guitarra son suaves, y realmente funcionan bien con las pastillas. Aunque me pareció que las pastillas eran el talón de Aquiles en su diseño general. Eso sí, es relativamente facil y barato mejorarlas si te decides a sustituirlas. Tengo que admitir que esto no me haría desistir de comprar esta guitarra. Tengo guitarras de entre 3 y 4 mil libras a las que les he quitado las pastillas de fábrica. Por lo tanto, eso no supone un problema para mí. Y sobre todo por este precio.
Equipada con un Wilkinson VS-50 II Precision Tremolo
Veredicto
En general, estoy impresionado por la calidad de esta guitarra de fabricación indonesia; como ya he mencionado antes, el ajuste y el acabado son impecables. También creo que la elección de un bonito diapasón de ébano, junto con los trastes de acero inoxidable hace que la experiencia de tocar sea muy agradable. El cuerpo de aliso es una gran elección y acústicamente la guitarra resuena muy bien. Además, ese tallado alemán en la tapa tiene una pinta estupenda, y disfruté del fácil acceso a los últimos trastes gracias a la forma del cuerpo con ese pronunciado doble cutaway.
Me encanta el acabado de esta guitarra, que queda muy bien en rojo; estoy muy tentado de probar también alguna vez la azul.
Va a ser difícil devolver esta guitarra, ¡por decirlo de alguna manera! No me costaría nada tocar en directo con esta guitarra, ya que transmite la sensación de ser un instrumento profesional en el que se puede confiar. No me gustaron las pastillas, pero soy muy tikismikis con los sonidos de las guitarras. Para mí sería fácil cambiarlas, pero entiendo que no todo el mundo es hábil con el soldador.
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